¿Sabías que de acuerdo con investigaciones científicas, el cerebro del ser humano está preparado para enamorarse alrededor de siete veces en la vida?
Claro que hay quienes disfrutan de los retos y están dispuestos a superar este número, pues al final ¡Qué lindo es amar!
Y aún más si hablamos de enamorarnos de un par de zapatos, estamos seguros que estos casos superarían cualquier estadística.
¿Te ha pasado?
Desde el aparador, atrapa y conquista tu mirada. El diseño, color y la esencia de esos auténticos zapatos de piel simplemente te llama. Entre todos los zapatos a su alrededor, sabes perfectamente que ese modelo fue hecho para ti, y sientes la conexión.
¡Te entendemos! Para nosotros es sumamente importante este vínculo y por ello tenemos un auténtico amor por cada pieza en la que trabajamos. Cada uno de nuestros pares es fabricado de manera personalizada, artesanal y con la máxima dedicación y pasión de nuestros artesanos.
Y es que la fascinación por un par de zapatos tiene sus explicaciones científicas, pues realmente existe una conexión directa con el calzado que usamos. Inicialmente con el que nos llama la atención.
Independientemente del calzado: tacones, mocasines, botas, oxfords, etc. Un zapato brinda la protección necesaria para la parte de nuestro cuerpo que soporta el andar. Es por ello que es tan importante que cada movimiento de nuestros pies conlleve la mejor compañía.
Que mejor, que avanzar y abrir paso a nuevos caminos con un calzado de piel que sea digno de admirar, que brinde la estabilidad y sobre todo que sea de la talla correcta.
Para nosotros más que un complemento, son auténticas obras en piel, que reflejan la tradición, el conocimiento, y las técnicas de generaciones que se han esforzado por transmitir una historia en cada proceso, en cada costura, en cada acabado.
Fabricamos un calzado de piel exclusivo para ti, para tu estilo, para tu personalidad, para que disfrutes cada paso y cada evento con él.